El Banco de España recordó que a partir de 2023 podrían comenzar las solicitudes de ayuda a los afectados por el aumento de los préstamos hipotecarios. Se trata de bancos que ya cumplen con el Código de Buenas Prácticas Bancarias y sus requisitos.
El Gobierno Español ha tomado medidas para ayudar a los afectados por la subida de las hipotecas a tipo variable. Es en honor al Banco de España (BDE), la máxima institución monetaria de España, que regula y supervisa no solo la política económica o financiera, sino también la banca. Según el Real Decreto 19/2022, recientemente aprobado por el Congreso de los Diputados, estas instituciones están obligadas a considerar determinadas formas de ayuda a los colectivos más afectados por el aumento de cuotas provocado por las crisis económicas.
La pandemia de COVID 19 y la inflación posterior han empujado el IPC ligeramente a la baja en los últimos meses, lo que obligó al Banco Central Europeo (BCE) a abandonar su papel contemplativo tradicional y, en cambio, asumir un papel de liderazgo en el endurecimiento de la política monetaria. Para frenar la inflación, el tipo de interés se elevó casi tres veces seguidas. Una estrategia eficaz, pero supone otra carga para los bolsillos de los ciudadanos.
El Euribor subió, las cuotas variables de la hipoteca también aumentaron exponencialmente, todo depende de ello. Según la plataforma financiera Asufin, la cuota hipotecaria media que tienes que pagar está aumentando en más de 1.300€ al año. Gastos de estructura e ineludibles que se combinan con otros gastos como la electricidad, la calefacción o el combustible. Por ello, el ejecutivo ha aprobado varias medidas para paliar el impacto de la política financiera sobre las hipotecas para la población, que el Banco de España espera restituir a quienes las necesitan. La llamada «reforma hipotecaria».
¿Condiciones para pedir las ayudas de la hipoteca variable?
BBVA, Banco Santander, CaixaBank, Sabadell y Unicaja ya siguen el código de buenas prácticas que regula diversas ayudas. De esta forma, los clientes de estos bancos podrán aplicar ya a partir de 2023. Pero tienen que pasar por una serie de filtros financieros basados en su nivel de ingresos y decidir cuánto dinero poner en una hipoteca en base a eso.
Habrá dos categorías de beneficiarios: Colectivos vulnerables y ciudadanos de rentas medias o bajas. La primera condición: el valor de la propiedad pignorada no supera los 300.000 euros y la hipoteca se incrementa en al menos un 30%. Luego hay dos requisitos según dos archivos de configuración.
Colectivos vulnerables
Si la renta es inferior a 25.200 euros al año y la cuota mensual de la hipoteca representa más del 50% de los ingresos.
- Carencia de dos años en la hipoteca.
- Pagar menores intereses.
- Alargamiento del plazo hasta siete años.
Colectivos con rentas medias o baja.
Si la renta familiar es inferior a 29.400€ anuales y la carga hipotecaria superior al 30% de los ingresos.
- Congelar la cuota hipotecaria doce meses.
- Cambiar la hipoteca de tipo variables a fijo, mediante la subrogación o novación.
- Alargamiento del plazo hasta siete años.
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